SABADO 16 DE ABRIL - TERCERA SEMANA DE PASCUA
EVANGELIO
Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Del Evangelio según san Juan 6, 60-69
En aquel tiempo, muchos discípulos de Jesús dijeron al oír sus palabras: "Este modo de hablar es intolerable, ¿quién puede admitir eso?.
Dándose cuenta Jesús de que sus discípulos murmuraban, les dijo: "¿Esto los escandaliza? ¿Qué sería si vieran al Hijo del hombre subir a donde estaba antes? El Espíritu es quien da la vida; la carne para nada aprovecha. Las palabras que les he dicho son espíritu y vida, y a pesar de esto, algunos de ustedes no creen”. (En efecto, Jesús sabía desde el principio quiénes no creían y quién lo habría de traicionar). Después añadió: "Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede”.
Desde entonces, muchos de sus discípulos se echaron para atrás y ya no querían andar con Él. Entonces Jesús les dijo a los doce: “¿También ustedes quieren dejarme?”. Simón Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna; y nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios”.
Palabra del Señor.Del Evangelio según san Juan 6, 60-69
En aquel tiempo, muchos discípulos de Jesús dijeron al oír sus palabras: "Este modo de hablar es intolerable, ¿quién puede admitir eso?.
Dándose cuenta Jesús de que sus discípulos murmuraban, les dijo: "¿Esto los escandaliza? ¿Qué sería si vieran al Hijo del hombre subir a donde estaba antes? El Espíritu es quien da la vida; la carne para nada aprovecha. Las palabras que les he dicho son espíritu y vida, y a pesar de esto, algunos de ustedes no creen”. (En efecto, Jesús sabía desde el principio quiénes no creían y quién lo habría de traicionar). Después añadió: "Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede”.
Desde entonces, muchos de sus discípulos se echaron para atrás y ya no querían andar con Él. Entonces Jesús les dijo a los doce: “¿También ustedes quieren dejarme?”. Simón Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna; y nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios”.
SÓLO EL SEÑOR JESÚS TIENE PALABRAS DE VIDA ETERNA
Verdad: La primera lectura de hoy se presenta como una especie de sumario, donde se da cuenta del progreso y la consolidación de la Iglesia cristiana, creciendo en la paz. Y se ilustra ese progreso mediante dos milagros realizados por Pedro, en cumplimiento de la misión que el Señor Jesús había confiado a sus apóstoles y discípulos: anunciar el Reino y realizar signos del amor y del poder de Dios que devuelve la vida, la salud, la dignidad y la esperanza a las personas. La curación del paralítico Eneas, y la resucitación de la pequeña discípula Tabitá, dan prueba de la autenticidad de la predicación y misión de los apóstoles.
El texto del Evangelio de Juan hoy recoge las reacciones de la gente y de los propios discípulos del Señor ante sus duras y radicales palabras en el discurso del Pan de Vida. Es un lenguaje duro, que todavía hoy causa dificultad y suscita vacilaciones en la fe de muchos seguidores del Señor, pues resulta incomprensible si no se acepta por la fe. Frente a la propuesta de Jesús en su discurso, se impone una opción: o se acepta o se rechaza. El Señor siempre respeta nuestra libertad para acogerlo o no en el misterio de la Eucaristía y en sus palabras que comunican vida eterna.
Camino: ¿Qué signos de la acción de Dios descubro en mi vida y en la historia, que animen y consoliden mi fe? ¿Con qué actitudes acojo las palabras de Jesús?
Vida: Señor Jesús: no obstante que tus palabras sean radicales y comprometedoras queremos decirte: tú sólo, Señor, tienes palabras de vida eterna. Amén.
Verdad: La primera lectura de hoy se presenta como una especie de sumario, donde se da cuenta del progreso y la consolidación de la Iglesia cristiana, creciendo en la paz. Y se ilustra ese progreso mediante dos milagros realizados por Pedro, en cumplimiento de la misión que el Señor Jesús había confiado a sus apóstoles y discípulos: anunciar el Reino y realizar signos del amor y del poder de Dios que devuelve la vida, la salud, la dignidad y la esperanza a las personas. La curación del paralítico Eneas, y la resucitación de la pequeña discípula Tabitá, dan prueba de la autenticidad de la predicación y misión de los apóstoles.
El texto del Evangelio de Juan hoy recoge las reacciones de la gente y de los propios discípulos del Señor ante sus duras y radicales palabras en el discurso del Pan de Vida. Es un lenguaje duro, que todavía hoy causa dificultad y suscita vacilaciones en la fe de muchos seguidores del Señor, pues resulta incomprensible si no se acepta por la fe. Frente a la propuesta de Jesús en su discurso, se impone una opción: o se acepta o se rechaza. El Señor siempre respeta nuestra libertad para acogerlo o no en el misterio de la Eucaristía y en sus palabras que comunican vida eterna.
Camino: ¿Qué signos de la acción de Dios descubro en mi vida y en la historia, que animen y consoliden mi fe? ¿Con qué actitudes acojo las palabras de Jesús?
Vida: Señor Jesús: no obstante que tus palabras sean radicales y comprometedoras queremos decirte: tú sólo, Señor, tienes palabras de vida eterna. Amén.
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